Nirvana Unplugged in Barrio de Santa Cruz
Nirvana Unplugged in Barrio de Santa Cruz
Octubre 1993, el concierto Unplugged de Nueva York se acercaba y el trío de Seattle, especialmente Kurt, no acababa de ver el formato acústico para una banda como Nirvana. La falta de confianza y la presión de la cadena MTV por comenzar los ensayos cuanto antes empujó a la banda a buscar nuevas fuentes de inspiración con las que sorprender a su público y salvar la fecha con éxito. Danny Goldberg, manager de Nirvana, acababa de volver de unas vacaciones en Sevilla y sugiere a los músicos pasar unos días en la ciudad para rebajar la presión pero sobre todo como estímulo artístico y cara de al concierto. La idea es bien recibida y después de unos días, Nirvana y su séquito aterriza en Sevilla. El tiempo apremia, sin embargo la banda parece más interesada en el paseo y el tapeo que en inspirarse musicalmente. Viendo la situación, la agenda se adelanta y se les lleva al mismo espectáculo al que Goldberg había asistido días atrás en La Casa del flamenco del Barrio de Santa Cruz. Los de Seattle aparecen por el local con mucho retraso y poco entusiasmo, pero los artistas del tablao consiguen despertar la curiosidad de la banda más allá del jamón que se les había prometido. Muy al tanto de quién tenían entre el público y compinchados con los organizadores del viaje, los artistas de la casa piden a los miembros de Nirvana el relevo al final del show. Se hacen de rogar pero finalmente Krist tira de Dave y Kurt y suben al escenario donde sus acompañantes ya habían colocado oportunamente algunos instrumentos. Pasaron unos minutos visiblemente desorientados hablando entre ellos hasta que, mediante gestos, pidieron a una de las palmeras del espectáculo que les acompañara en el tablao. Se sentaron, afinaron y se arrancaron con un “Come as you are” ligeramente acelerado y abreviado que dejó perplejo al que tuvo la suerte de estar allí esa noche*. Al día siguiente hicieron las maletas y volvieron a Nueva York con la cabeza puesta en el acústico. No se sabe si tomaron alguna nota mental de lo que allí vieron, lo que si es seguro es que, si las tomaron, nunca las pusieron en práctica